Prometo guardarte en el fondo de mi corazón
Prometo acordarme siempre de aquel raro diciembre
Prometo encender en tu día especial una vela
Y soplarla por ti
Prometo no olvidarlo nunca
Tenía tanto que darte
Tantas cosas que contarte
Tenía tanto amor, guardado para ti
Tenía tanto que darte
Tantas cosas que contarte
Tenía tanto amor, guardado para ti
Camino despacio, pensando volver hacia atrás
No puedo, en la vida las cosas suceden, no más
Aún pregunto qué parte de tu destino, se quedó conmigo
Pregunto, qué parte, se quedó por el camino
Tenía tanto que darte
Tantas cosas que contarte
Tenía tanto amor, guardado para ti
Tenía tanto que darte
Tantas cosas que contarte
Tenía tanto amor, guardado para ti
Tenía tanto, que a veces maldigo mi suerte
A veces la maldigo, por no seguir contigo
Tenía tanto que darte
Tantas cosas que contarte
Tenía tanto amor, guardado para ti
Tenía tanto que darte
Tantas cosas que contarte
Tenía tanto amor, guardado para ti
Meses atrás, SergioOpina recibía, por primera vez en forma de entrevista, a un entusiasta artista de origen chileno, componente de la banda (por ahora, inactiva) Lanudosis, que comenzaba a pavimentar los cimentos de su carrera en solitario: Joaquín Jauregui.
Tras Evadir (pista de Max Morales) y Era (corte en el que ambos artistas se unían a Teclo) e inmerso en la elaboración de Tributo, su primer proyecto discográfico en solitario, una compilación pop-rock de distintos temas, el intérprete presenta el primer single extraído del mismo, titulado Tenía Tanto, cuya portada, añadida al comienzo de la entrada, muestra al artista con el rostro tapado casi en su totalidad por sus manos, y un fondo negro tras de sí.
Tras Evadir (pista de Max Morales) y Era (corte en el que ambos artistas se unían a Teclo) e inmerso en la elaboración de Tributo, su primer proyecto discográfico en solitario, una compilación pop-rock de distintos temas, el intérprete presenta el primer single extraído del mismo, titulado Tenía Tanto, cuya portada, añadida al comienzo de la entrada, muestra al artista con el rostro tapado casi en su totalidad por sus manos, y un fondo negro tras de sí.
Más de siete años han transcurrido desde que Nena Daconte, en aquel entonces aún una agrupación con Kim Fanlo y no el nombre artístico de Mai Meneses, publicase su segundo álbum de estudio, Retales de Carnaval. El primer sencillo que se extrajo del mismo fue, nada más y nada menos que, aquel Tenía Tanto Que Darte, un emotivo y enérgico single que sería recibido en España, donde tanto éxito cosechó, con los brazos abiertos. Ahora, tanto tiempo después, dicha canción es versionada (con un título algo más corto, como habréis comprobado) por Joaquín Jauregui y, desde luego, no os lo podéis perder.
No es necesario que transcurran más que pocos segundos para darnos cuenta de que nos hallamos ante una adaptación más pulida y, en cierto modo actualizada, del tema original aunque, como puede comprobarse, se mantiene el mismo tipo de instrumentación, así como el tempo. También persisten las características onomatopeyas que aderezan el final del sencillo, momento ejecutado de forma brillante por el cantante chileno. Quizá el hecho de que no haya una multitud de variaciones con respecto a la composición inicial suponga una ventaja que permita prestar un mayor nivel de atención a la pista vocal, caracterizada por una sensible y desgarradora interpretación por parte del artista, un aspecto clave que sintetiza a las mil maravillas con una letra en la cual priman tales emociones, como producto de una fallida relación de la cual solo restan minúsculos fragmentos e infinitos recuerdos.
A principios del mes de diciembre, cuando se ponía a la venta este nuevo corte promocional, veía la luz también su vídeo musical, el cual es una fiel representación de todo cuanto narran los versos que se escuchan. El artista recibe una llamada de una reputada artista, también originaria de Chile, Victoria Mus, la misma que le abre las puertas de su casa en mitad de una celebración. Cuál es su sorpresa cuando descubre al hombre de su vida disfrutando sospechosamente y apartado de la multitud, con otra mujer. Entonces, presa de la angustia, introduce su teléfono móvil en una jarra de cerveza y abandona la estancia, dirigiéndose a su hogar, desconcertado, aturdido y con algún que otro incidente de por medio (el tomar un ramo de flores de una feliz pareja, ajena a él, para arrojarlo al suelo, es una clara muestra de desolación), finalizando el vídeo con una mesa vacía, penas ahogadas en alcohol y la perspectiva de una fotografía que reflejaría los momentos pasados y dichosos de amor de ambos hombres que, muy probablemente, jamás regresarán.
En definitiva, canción y vídeo conforman un conjunto de emociones que hacen notorio un duro trabajo tras las cámaras y en el estudio que, por suerte, ha sido recibido de la mejor forma posible. Menos de un mes después de su edición, el clip acumula en torno a 30.000 visualizaciones y, seguidores míos, logró posicionarse en el número uno de sencillos de la tienda de iTunes de Chile, situándose durante una determinada cantidad de tiempo por encima del inmenso huracán llamado Adele, con lo que ello significa. Todos vosotros podéis contribuir en la repercusión del artista adquiriendo por solamente 1,98€ en iTunes su tema, el cual incluye una emotiva variación del tema en forma de balada a piano. Enhorabuena, Joaquín: ¡y que no quepa ni la menor duda de que su mejor momento aún está por llegar!
Esta canción siempre me ha gustado. Está bien esta versión. Bss.
ResponderEliminarEstoy totalmente de acuerdo, Cris. Es una canción que, del panorama nacional, siempre ha permanecido en mi recuerdo.
Eliminar¡Gracias por comentar! Besos.