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martes, 1 de septiembre de 2015

¡Taylor Swift, clase y desamor en el maravilloso vídeo de "Wildest Dreams"!


He said, let's get out of this town
Drive out of the city
Away from the crowds
I thought heaven can't help me now
Nothing lasts forever

But this is gonna take me down
He's so tall, and handsome as hell
He's so bad but he does it so well
I can see the end as it begins,
My one condition is

Say you'll remember me 
Standing in a nice dress, staring at the sunset, babe
Red lips and rosy cheeks
Say you'll see me again
Even if it's just in your wildest dreams
Wildest dreams

I said no one has to know what we do
His hands are in my hair, his clothes are in my room
And his voice is a familiar sound, nothing last forever

But this is getting good now
He's so tall, and handsome as hell
He's so bad but he does it so well
And when we've had our very last kiss
But my last request it is

Say you'll remember me 
Standing in a nice dress, staring at the sunset, babe
Red lips and rosy cheeks
Say you'll see me again
Even if it's just in your wildest dreams
Wildest dreams

You see me in hindsight
Tangled up with you all night
Burn it down
Some day when you leave me
I bet these memories hunt you around

You see me in hindsight
Tangled up with you all night
Burn it down
Burn it down
Some day when you leave me
I bet these memories follow you around
Follow you around

Say you'll remember me 
Standing in a nice dress, staring at the sunset, babe
Red lips and rosy cheeks
Say you'll see me again
Even if it's just pretend

Say you'll remember me 
Standing in a nice dress, staring at the sunset, babe
Red lips and rosy cheeks
Say you'll see me again
Even if it's just in your wildest dreams
Just pretend
In your wildest dreams
Even if it's just in your wildest dreams
In your wildest dreams

¡Tal y como fue anunciado cuando veía la luz un pequeño tráiler del mismo,  el pasado 30 de agosto Taylor Swift estrenó en primicia, como finalización de la pre-gala de los MTV VMAs del 2015, su nuevo videoclip para "Wildest Dreams"!

El tema, confirmado a comienzos del pasado mes como el quinto single de "1989", su más reciente álbum de estudio (tras "Shake It Off", "Blank Space", "Style" y "Bad Blood"), está producido por Max Martin y Shellback y escrito por los mismos junto a la cantante, tratándose de una oscura y sensual pista que, sin lugar a duda, es de las más destacables del conjunto de temas al que pertenece.

Dirigido por Joseph Kahn, que ha colaborado con la cantante precisamente en los dos más memorables vídeos musicales de esta etapa de su discografía, era añadido instantes después que pudiésemos visualizarlo por primera vez en su canal de VEVO: casi veinticuatro horas después, ha alcanzado más de diez millones de visitas, ¿alcanzará pronto la certificación de VEVO Certified? ¡Probablemente así sea!

Lo cierto es que, a juzgar por el pequeño adelanto que veía la luz días antes de su estreno, podíamos intuir un trabajo visual semejante al de "Style", plagado de encanto y cargado de matices, pero para nada tan majestuoso o vigoroso como, por ejemplo, el clip de "Blank Space". No obstante y, a pesar de que al escuchar el tema en cuestión imaginaba un vídeo plagado de erotismo, es innegable lo grata que es nuestra sorpresa cuando disfrutamos de él por primera vez, puesto que el resultado no podría ser más sensacional. 


Da comienzo con distintos planos de la calurosa y característica sabana africana, sobre los que son proyectados el nombre de Swift, Kahn y del tema al que promociona. Y es que este paisaje tendrá un protagonismo más que pronunciado (y acertado) a lo largo de los tres minutos y cincuenta y cuatro segundos de duración del clip.



Aquel plano que observábamos en el teaser del ojo de la cantante solo es añadido en este instante del vídeo, tras un gran foco de luz cuyo empleo, hasta ahora, desconocemos.



Un foco y un ventilador...¿Qué usos podrían tener en un sitio tan agreste?



Inmediatamente, observamos a la artista, en una de las ocasiones que más radiante ha lucido (con lo que dicha afirmación conlleva), acompañada de dos personas que dan los últimos toques a su maquillaje y peinado. Su tono de cabello, desprendido de su habitual rubio, es sensacional, ¿no os parece?



Poco a poco el guión (valga la redundancia, tomando en cuenta en qué se basa la historia del vídeo) va cobrando sentido, puesto que se halla inmersa en el rodaje de lo que podría ser una especie de película. Y, a juzgar por sus gestos, podemos intuir que su compañero ha despertado en ella alguna que otra sensación. 



Una cantidad considerable de personal se encuentra en dicho momento acompañando a ambos. Entonces, aparece frente a nosotros una claqueta, sumergiéndose ambos actores tras su intervención en un cálido beso.



Un apasionado beso en la inmensidad de la sabana. Muy romántico, ¿cierto? Tanto, que cualquiera diría que poco a poco los sentimientos que unirían a ambos en el mundo profesional y cinematográfico cobrarían vida propia e irrumpirían en sus corazones.



Las grabaciones prosiguen y, posteriormente, podemos disfrutar de dos de las más mágicas secuencias que ofrece este vídeo musical: una de ellas muestra a la pareja en lo alto de una catarata, presos de las sensaciones que los unen, ofreciendo planos más que espectaculares de dicha cascada, visualizada desde lo alto.


Y otro en el que Swift ondea su precioso (y largo) vestido amarillo al son de un enorme ventilador, ofreciéndonos uno de los momentos visuales más preciosos del vídeo. ¡Rebosa elegancia y distinción de forma sublime! Destacar a la omnipresente y adorable jirafa que observamos, también, tras ella. 







Y, una vez habiendo distinguido a un grupo de elefantes, proseguimos con el rodaje y, esta vez, en esta pequeña escena, podemos recrearnos una visión de cómo yo imaginaba desde un principio que sería el clip.



Siendo, sin lugar a duda, el momento más carnal de todo el vídeo, ambos se hallan en un dormitorio clásico a más no poder (puesto que, si aún no es tan evidente, está ambientado entre los años 1920 y 1930) en el que, sumidos en la pasión, disfrutan de su mutua compañía.




No obstante, parece que algo va mal. El set continúa y nuestra querida actriz arremete, furiosa, contra el mismo. Él responde de la misma manera, aunque resignándose y propinándole una patada a un objeto cercano al mismo. 



No obstante, el trabajo es el trabajo, como bien sabemos todos. Y, aunque a regañadientes, Taylor y su amado, que es interpretado, por cierto, por Scott Eastwood, se besan otra vez ante las cámaras.




Inmediatamente, procedemos a disfrutar de una de las más memorables partes del vídeo: ambos vuelan sobre la cálida sabana con un avión característico de la época.



Swift, caracterizada con muy buen gusto y acorde a la moda de la etapa en la que nos hallamos, disfruta como la pasajera cuando le da la mano a Eastwood, que lleva las riendas del aeroplano.




La última imagen que podéis contemplar antes de este párrafo es, cuanto menos, sorprendente. ¡Y es que este vídeo es asombroso, pero el apartado de fotografía no podría ser más brillante!



Observando la nave realizando su vuelo en mitad del ocaso, de nuevo (y por última vez), portando el refinado traje que roza la tonalidad ocre, distinguimos a la artista, ondeando su vestido al viento con una gracia y una sutileza maravillosas y que otorgan un acabado aún más grandioso al videoclip






Inmediatamente comienza a sonar el puente de "Wildest Dreams" y es, entonces, cuando el contacto de su faceta visual con la naturaleza alcanza su culmen. ¿Habéis visto eso? ¡La artista se halla a escasos centímetros de un león que permanece, calmado, junto a la misma!



El romanticismo hace de nuevo acto de presencia y, esta vez, en medio de un más que nostálgico y crepuscular atardecer, de una cristalina llovizna, bajo un resplandeciente firmamento estrellado e incluso en la inmensidad de una tormenta eléctrica. ¡Si es que lo importante no son la circunstancias, sino la compañía! Y, por supuesto, qué mejor que la coincidencia de que ambas sean gratas.




En este momento visualizamos la mayor variedad de especies animales que, en su hábitat, realizan su aparición en el vídeo: desde una agrupación de cebras, pasando por lo que podría ser una manada de ñúes, un felino corriendo en libertad o distintas aves. 




E, incluso, la cantante galopa a espaldas de un fornido caballo. ¿Podría tratarse de una doble? ¡En cualquier caso, no deja de ser emocionante! 





Tras otro excitante encuentro de sus labios que, sin que ellos mismos fuesen conscientes, sería el último que compartirían, podemos verles de nuevo, ejerciendo frente a las cámaras, pero inexplicablemente, con un decorado. ¿Quizás cambiarían de localización por algún incidente? O...¿Acaso es todo lo anterior producto de la imaginación de ambos? Esto último no parece un argumento consistente, con lo cual optemos por la primera opción.




Ambos se despiden, intercambiando una última despedida, ante las luces y las cámaras. 


¡Y llega el gran evento! Con muchísima clase y glamour, la artista baja de su distinguido automóvil para hacer acto de presencia en la première de su película, ante la mirada de todos los asistentes y su correspondiente recibimiento por parte de la prensa y los paparazzi.




Nos hallamos prácticamente en el corazón del Hollywood de la primera mitad del siglo XX, frente a una bulliciosa cantidad de personas que esperan, expectantes, el estreno del tan esperado filme cuyo cartel puede observarse a las puertas del cine.



Esta noche es muy importante para ella y podría conducirse de forma excelente pero, sin embargo, se encuentra con una visión, cuanto menos, desconcertante y desoladora. Y es que su compañero de reparto es besado por la mujer que probablemente sería su pareja, que inmediatamente procede a tomarle la mano.




Y, a pesar de que es bastante probable que Swift fuese consciente de la dificultad que supondría para ambos sobrellevar sus emociones fuera de sus facetas profesionales, con lo compleja que es la fama, no puede evitar el sufrimiento, imposible de ocultar incluso entre la mareante multitud y ante los fotógrafos. 



Una vez dentro de la sala del cine, comienza la proyección y observamos una de las secuencias protagonizadas por ambos, lógicamente en blanco y negro, continuando con la ambientación retro del vídeo.




Ante su tristeza y todos los pensamientos que en ese momento deambulan por su cabeza, posa sus ojos en él y, dolida, tras un par de segundos de proyección, baja la cabeza y procede a abandonar la estancia puesto que es lo que, en ese momento, su corazón le dicta.



Es entonces cuando disfrutamos de otro de los más espectaculares y apoteósicos momentos del clip: su deslumbrante y sutil atuendo luce a las mil maravillas cuando corre por la pequeña alfombra roja con la intención de subirse en su coche y abandonar el lugar. Momento en el que nos damos cuenta de lo estupendos que son los efectos especiales empleados. 



Una vez dentro, su compañero y amado abre las puertas del cine en su busca, pero es demasiado tarde.



El vehículo emprende su marcha y, a través de uno de los retrovisores, la cantante, con el corazón fragmentado y derruido en miles de pedazos, observa su reflejo.



Entonces, dicha historia llega a su fin con una imagen del actor, tras el automóvil, observando en la inmensidad de la noche hollywoodiense, cómo aquella mujer que le entregó su corazón se aleja de él, entre las luces de la ciudad, que permanece húmeda debido a una previa lluvia. 


¿Quizás nunca dejase de amarle y ella significase para él más que un mero capricho del destino? El concepto del tema cobra vida una vez llegados a este punto ya que, como bien indica la artista, puede intuir el final de la relación cuando esta apenas ha empezado. Por ello, con esperanza, pide que no le olvide, ni tan siquiera en sus sueños más "salvajes". ¡No podría ser más conmovedor!

Tras ello, es añadida una imagen que indica que todos aquellos beneficios que la intérprete obtenga a partir del vídeo serán destinadas al proceso de conservación de animales salvajes, a través de African Parks Foundation of America, asociación sin ánimo de lucro cuya función es garantizar en siete parques nacionales de ocho países de África el cuidado de la supervivencia de las distintas especies. ¡Un gesto halagador, por cierto! Y más aún teniendo en cuenta las circunstancias en las que, muchas veces, podrían ser maltratados dichos seres para hacer aparición en vídeos musicales.


¿Qué os parece? Al menos, para mí, se trata de un videoclip la mar de emotivo, maravilloso y todo un regalo visual. ¡Confío en que disfrutéis tanto como yo del vídeo musical de "Wildest Dreams"!

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